Los alquídicos fueron introducidos en 1928 por Kienle y se habían utilizado para lacados y retoques en madera, Winsor & Newton desarrollo puso en el mercado los primeros médiums alquídicos en 1960 con la introducción del Liquin, Wingel, y Oleopasto. Al contrario que las tradicionales resinas naturales de dammar, copal o mastic que constituían la mayor parte de los médiums disponibles en la época, los médiums alquídicos reducen el tiempo de secado a menos de la mitad (en las pruebas realizadas entre 12 y 24h), una ventaja que no poseen otros métodos tradicionales. Los Medius Liquin utilizan una resina alquídica, es decir, una resina sintética de aceite modificado que aumenta la fluidez y la transparencia y proporcionan un secado rápido, no amarillean y proporcionan mayor elasticidad a la capa de la pintura, evitando agrietamientos y aumentan la resistencia al envejecimiento del color Toda la gama Liquin, se puede usar con pintura al Oleo, oleo alquìdico Griffin y Oilbar. (ole